Bajando: Dani Benítez

Dani Benitez cumple con esta su tercera temporada en primera con el Granada, y lo hace con el proyecto del club asentado y con la mejor plantilla desde su regreso a la liga BBVA. En su temporada de debut tuvo que lidiar con el segundo salto de categoría en dos años, con alguna expulsión estúpida marca de la casa, y con el mes que le tuvo Fabri en la nevera justo antes de ser cesado. Como colofón quedó aquel botellazo a Clos Gómez que le costó tres meses de sanción, y que quedará para siempre en nuestras retinas y en el Youtube.

La segunda temporada estuvo marcada por la famosa sanción y por las lesiones, lo que le llevó a disputar sólo nueve partidos y tener una aportación testimonial. Muchas piedras en el camino para que se asentara un jugador joven y de carácter explosivo.

Sin embargo la que tiene que ser su temporada de consagración de momento no ha empezado demasiado bien. A pesar de los refuerzos Dani sigue siendo un titular indiscutible, Alcaraz cree en él y lo demuestra dándole un sitio en el equipo domingo tras domingo. Con lo que no contábamos es con que este año no hubiera nada a lo que echar la culpa más que su propio desacierto, ese que le ha llevado a ser cambiado en los cuatro partidos de liga disputados, con cabreo en Vigo incluído, o que ha hecho que su propia afición le pite cada vez que falla un tiro o un pase. La pérdida de galones en una de sus facetas más reconocibles, los lanzamientos de balón parado, podrían ser tanto síntoma como parte de causa en su irregular arranque, y los abucheos desde la grada tampoco van a ayudar a un jugador con una personalidad tan volátil.

En teoría su puesto no debería peligrar, pero la plantilla cuenta con varios jugadores que podrían actuar en su posición (Pereira, Buonanotte, Piti, Campos), y el pretendido salto de calidad del Granada podría no tener tiempo para esperar a nadie.